Tanto la Península como las islas Baleares han ocupado un lugar destacado en la geografía desde la antigüedad. Fenicios, griegos y romanos ya navegaban y comerciaban por el Mediterráneo hace miles de años. El Mare Nostrum era, en efecto, un mar bien conocido debido a su carácter de mar cerrado y relativamente seguro, y las islas eran puntos de referencia y de escala para la navegación. El archipiélago balear ya aparecía incluido e incluso dotado de coordenadas longitud y latitud en la Geographia de Ptolomeo (siglo II), concretamente en el mapa correspondiente a Hispania (tabula secunda Europae). La primera aparición de las islas Baleares en un mapa impreso se produjo, por tanto, en la más antigua edición de la Geographia: la de Bolonia de 1477 (Fig. 1).

tabula 2

Figura 1. Tabula segunda de Europa. Bolonia (1477). John Carter Brown Library. Brown University

 

Antes de esta primera representación impresa, el archipiélago Balear ya apareció en diversos  mapas manuscritos: códices ptolemaicos previos a la imprenta, mapas medievales y, de forma sorprendentemente exacta, en las cartas portulanas o cartas náuticas (también manuscritas) conocidas, al menos, desde finales del siglo XIII (Fig. 2).

Islas baleares

Figura 2. Detalle de la Carta Pisana (ca. 1290). Bibliothèque Nationale de France

 

Sin embargo, en todos los casos mencionados anteriormente las islas Baleares aparecían siempre incluidas dentro de un marco geográfico más amplio: Hispania, el Mediterráneo e incluso el mundo conocido. Habrá que esperar, pues, a la publicación del Isolario de Benedetto Bordone en 1528 para encontrar los primeros mapas impresos dedicados específicamente a éstas y otras islas. El género de los islarios o libros de islas, apareció en Florencia a principios del siglo XV y se mantuvo vivo durante unos trescientos años.

El de Bordone es el segundo islario impreso de la historia, tras el incunable de Bartolommeo Dalli Sonetti (ca. 1485). Sin embargo, el libro de islas de este último solo incluía las islas griegas, mientras que el de Bordone, posterior a los grandes descubrimientos de españoles y portugueses, contiene 111 mapas de islas de todo el mundo conocido incluyendo, por supuesto, no solo el Mediterráneo Oriental y las islas griegas como en el de Bartolommeo, sino también el Occidental.

Los primeros mapas impresos dedicados específicamente a las islas Baleares, que son los incluidos en la obra de Bordone, son dos pequeños y sencillos grabados xilográficos, correspondientes a las Gimnesias (Maiorica y Minorica) (Fig.3) y las Pitiusas (Ieviza y Formentaria) (Fig. 4) respectivamente, insertos en sendas páginas con textos descriptivos sobre su historia y geografía.

gimnesias bordone

Figura 3. Mapa de Mallorca (maiorica) y Menorca (minorica) en el islario de Bordone. Instituto Geográfico Nacional

 Pitiusas Bordone

Figura 4. Mapa de Ibiza (ieviza) y Formentera (formentaria) en el islario de Bordone. Instituto Geográfico Nacional

 

El Instituto Geográfico Nacional ha adquirido recientemente la segunda edición de esta importante obra, reimpresa en 1534 (Fig.5), lo que atestigua la difusión y éxito comercial que tuvo la primera. El Isolario de Bordone, que estará expuesto a partir del 26 de abril en la Sala de Exposiciones del IGN en la nueva muestra titulada «De Iberia a España a través de los mapas», reserva otras sorpresas cartográficas que iremos desvelando en próximas entradas del blog.

portada Bordone

Figura 5. Portada de lsolario de Bordone (1534). Instituto Geográfico Nacional

Marcos Fco. Pavo

Marcos Fco. Pavo Jefe del Área del Registro Central de Cartografía
Instituto Geográfico Nacional
Ministerio de Fomento